La neurociencia social estudia lo que sucede en el cerebro mientras las personas interactúan. Investigaciones revelan que algunas de las cosas que los líderes hacen—específicamente exhibir empatía y alinearse con los estados de ánimo de los demás—afectan tanto la química de su cerebro como la del cerebro de los seguidores. Esta dinámica líder-seguidor no resulta de dos cerebros reaccionando consciente o inconscientemente entre ellos. Las mentes individuales de alguna forma se “fusionan” en un sistema único. Los autores Goleman y Boyatzis plantean que un buen líder es aquel que modifica su comportamiento para potencializar este sistema de interconexión cerebral. Plantean que liderar efectivamente no se trata de tener habilidades sociales sino de desarrollar un genuino interés y un talento para fomentar los sentimientos positivos en aquellas personas de quienes necesita apoyo y cooperación. A esto le llaman Inteligencia Social y el nuevo planteamiento es que la misma tiene un soporte biológico.
Ahora sabemos que cuando decimos que los seguidores reflejan a sus líderes no es metafórico, sino biológico. Se han identificado unas neuronas espejo en áreas del cerebro que operan como una especie de “Wi-Fi”, permitiéndonos manejarnos en el mundo social. Las neuronas espejo son importantes en las organizaciones ya que las emociones y conductas de los lideres motivan a los seguidores a reflejar los mismos sentimientos y emprender las mismas acciones. El efecto de activar los circuitos neuronales en los seguidores es muy poderoso. Hay evidencias de que estar de buen humor les permite a las personas recibir información de manera más efectiva y responder de forma más creativa. Se demostró, por ejemplo, que los lideres de más alto desempeño motivaron la risa en sus subordinados tres veces más que los de peor desempeño. Ahora entiendo la cita que dice que “la risa es la distancia más corta entre dos personas.”
Como líderes, estamos biológicamente capacitados para “activar” las neuronas espejo de nuestros seguidores y fomentar en ellos emociones y actitudes positivas. De manera inadvertida, con nuestra forma de ser, incidimos constantemente en quienes nos rodean. Te invito a tomar consciencia de tu estado de ánimo y actitud para utilizar deliberadamente tus neuronas de la empatía y la conexión. Es fácil. Puedes empezar ofreciendo una sonrisa, ahora.
Maril Núñez es Coach Personal & Profesional. maril.nunez@invenio.com.do
Columna Ser Líder. El Caribe. 14 de Diciembre 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario